Adelgazar, lo que se dice adelgazar, no es un término demasiado relacionado a la vida sedentaria que se lleva a cabo en muchos puestos de trabajo. Pero si sigues estos 10 consejos sobre cómo no engordar en la oficina, desde que llegas hasta que te vas, ayudarás a tu cuerpo a mantener la línea. Toma nota:
1. Bicicleta o caminatas para ir al trabajo. Deja el coche en casa siempre que puedas.
2. Al llegar al edificio, mejor escaleras que ascensor, claro.
3. No abuses de las bebidas azucaradas. Y si no puedes reprimir tomarte una bebida de vez en cuando, elige refrescos Zero azúcares o endulza con sacarina tu té o café.
4. En cualquier caso, el agua debe ser tu mejor fuente de hidratación.
5. Por supuesto, nada de bollería industrial.
6. Otra regla básica para no engordar en la oficina es llevarte la comida desde casa, sobre todo si en el tupper metes recetas sanas: nada de platos precocinados.
7. Levántate y estira las piernas de vez en cuando.
8. Haz pequeños ejercicios de piernas sin levantarte de tu silla de oficina. Para ello hay más artilugios de los que imaginas.
9. Si no quieres engordar en la oficina, llama por teléfono de pie, caminando, pero sin molestar a tus compañeros.
10. Apúntate a competiciones deportivas que organice tu empresa: pádel, fútbol y mucho más. Además de mejorar las relaciones laborales con tus colegas, mantendrás la forma.
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